La central térmica de El Palmar, situada en el barrio del mismo nombre en la capital de la isla de La Gomera, renueva un año más la certificación europea EMAS (Eco Management and Audit Scheme) con el que se ratifica su compromiso, acreditado mediante varias auditorías independientes, de mejorar continuamente su Sistema de Gestión Ambiental. Este certificado, emitido en el primer semestre de 2024, supone la luz verde de Europa a la operatividad de la central, al comprobarse que sus parámetros de emisiones están dentro de las exigencias medioambientales de la UE.
El centro gomero de producción eléctrica se ha adherido de manera voluntaria al Sistema Comunitario de Gestión y Auditoría Medioambientales para obtener el certificado EMAS, lo que garantiza que sus procedimientos ambientales han sido desarrollados conforme al estándar internacional de la norma ISO 14001, donde se recogen los criterios de gestión de los riesgos ambientales. Además, la central térmica de la isla tiene adquirido el compromiso de establecer y mantener un Sistema Integrado de Gestión, cumpliendo también con los requisitos establecidos en las normas UNE-EN ISO 14.001: 2015, UNE-EN ISO 9.001:2015, y UNE-EN ISO 45.001:2018, orientado al logro de los objetivos y compromisos establecidos en su política.
El centro de producción eléctrica de El Palmar, en San Sebastián de La Gomera, ha adaptado su Sistema de Gestión al Reglamento Europeo 1221/2009, relativo a la participación voluntaria de organizaciones en un sistema comunitario de gestión y auditoría medioambientales (EMAS) que ha sido renovado una vez más en el año 2024 bajo el registro oficial.
A su vez, esta inscripción al EMAS, añade a la gestión de la producción eléctrica un grado más de transparencia, ya que deja a disposición del público una Declaración Ambiental anual donde se recoge la evolución de los indicadores de control ambiental, así como el grado de cumplimiento de los objetivos de mejora ambiental.
En relación con las acciones llevadas a cabo en la central gomera para la mejora del compromiso ambiental, alcanzar objetivos y metas y asegurar el cumplimiento de los requisitos jurídicos relacionados con el medio ambiente, caben señalar las adaptaciones de mejora continua que se realizan en las mismas de forma activa, a la vez que se hacen extensivos todos los requisitos de formación, sensibilización, buenas prácticas ambientales y cumplimiento de la legislación a las empresas contratistas que prestan sus servicios en las instalaciones.
La inclusión de las centrales en el registro EMAS implica que las declaraciones ambientales, verificadas mediante auditoría por la Asociación Española de Normalización y Certificación (AENOR), sean de carácter público. Dichas declaraciones son actualizadas cada año y recogen la evolución de los indicadores ambientales, así como el grado de cumplimiento de los objetivos de mejora.