La presidenta del Parlamento de Canarias, Astrid Pérez, ha sido elegida hoy por unanimidad presidenta de la Conferencia de las Asambleas Legislativas Regionales de Europa (CALRE) para el año 2025. Convirtiéndose en la primera mujer en Canarias en presidir este órgano internacional. La votación se produjo en el marco de la celebración del Comité Permanente y la Asamblea de este órgano internacional.
“Es un honor representar a mis compañeros presidentes y presidentas de todos los Parlamentos europeos”, comenzó diciendo la presidenta canaria agradeciendo en primer lugar el apoyo de los representantes de Cámaras autonómicas españolas, que propusieron su candidatura.
Astrid Pérez ha defendido la necesidad de asegurar que “nuestras regiones se sientan copartícipes en la adopción de decisiones de relevancia europea”, además ha insistido en que “la política de cohesión es el instrumento más eficaz para mantener el estatus específico de los territorios más alejados del continente”.
En su intervención, la presidenta señaló que presidirá la CALRE con el objetivo primordial de fortalecer la democracia europea y los valores que sirvieron de base para la fundación de la Unión, preservando la convivencia, la tolerancia y las singularidades territoriales.
Sobre Canarias, Astrid Pérez dijo que “Europa debe seguir compensando las desventajas que supone ser una región ultraperiférica” un aspecto que “ debe reflejarse en el Marco Financiero para el periodo 2027-2033”. Ha valorado la necesidad de “defender y consolidar la descentralización y establecer un compromiso de unidad en las decisiones relativas a las singularidades de los territorios”.
Respecto a la situación de las redes de comunicación actuales, la presidenta afirmó que “la Inteligencia Artificial y las tecnologías marcan una nueva era en el escenario socioeconómico mundial y europeo y la Conferencia debe marcar una estrategia que nos acerque a nuestros ciudadanos”.
Para finalizar Astrid Pérez invitó a todos lo representantes de las asambleas y parlamentos de la CALRE a colaborar juntos en el progreso de Europa y de las regiones.