Las condiciones meteorológicas adversas en los aeropuertos de La Palma, La Gomera y El Hierro llevaron ayer a la cancelación de un total de diecisiete vuelos que operaban con el aeródromo Tenerife Norte-Los Rodeos, que, una vez más, se convirtió en víctima de los efectos de las circunstancias del tiempo. El resultado final en esta ocasión: cientos de pasajeros que se quedaron sin viajar.
Según algunos afectados, les ofrecieron entrar en lista de espera durante la tarde, a la espera de alguna plaza libre en los siguientes vuelos, habida cuenta del lleno que se registra en la mayoría de los aviones como resultado de los habituales desplazamientos entre las Islas durante el período navideño. Ante eso, muchos de ellos se acabaron decantando por no volar.
El principal foco del problema estuvo en La Palma, donde la calima redujo la visibilidad; de ahí que se cancelasen seis salidas a Tenerife Norte desde ese aeropuerto, así como las vueltas vinculadas al no estar en la Isla el aparato. Solo un caso, un vuelo procedente de Fuerteventura, tuvo que ser desviado al Tenerife Sur-Reina Sofía por la mala visibilidad que provocó la neblina en Los Rodeos. Cabe recordar que en Los Rodeos el aterrizaje se realiza en lo que en el argot aeronáutico se denomina «en visual» (para lo que se requiere un mínimo de 5.000 metros de visibilidad) y la niebla lo impidió ayer en un caso. Sin embargo, las condiciones meteorológicas que ayer afectaron a La Palma, por calima, redujeron esta a entre 4.000 y 4.500 en el momento en que se produjeron las cancelaciones.
Asimismo, también se suspendieron dos llegadas desde El Hierro y una de La Gomera y a El Hierro, en ambos casos por problemas de visibilidad desde los dos aeropuertos de origen.
Esto se produce al cierre de un año que trajo consigo un verano aciago por la niebla en el aeropuerto del Norte, que en el período estival es cuando más afectado se ve por ese fenómeno.