Año 2014. Toda la Gomera se encuentra dominada por el imperio del empleado-presidente Curbelo. ¿Toda? No,en Valle Gran Rey un pequeño barrio de irreductibles resiste gracias a una poción mágica: SU UNIDAD. Mientras en toda la isla se hace lo que manda el conde,en Vueltas todavía decide el pueblo.
Como Asterix y Obelix resistiendo el acoso del imperio romano,los vecinos de Vueltas han sido los primeros en plantarse frente a aquellos que quieren decidir su futuro desde fuera mientras dicen «esto hay que hacerlo así porque lo digo yo y porque si no perdemos la inversión».
Esta vez,alguien ha decidido que lo mejor es peatonalizar la calle Vueltas (principal vía del barrio) y cerrarla al tráfico con un pivote del que darán llave a todos los vecinos. Más allá de que prácticamente van a tener que darle llave a todo el barrio,que el pivote se va a mover más que el Águila,que se van a cargar todos los aparcamientos sin tener una alternativa sería viable (el muelle no está acondicionado para ello y menos en invierno con la mar ensalitrando los vehículos),que no se haya dado solución a la calle Italia que quedará sin salida,… más allá de todo eso,han cometido el error de mentir prometiendo a los vecinos que las obras se llevarían a cabo en época de baja ocupación. En vez de eso,se inicia en temporada alta con los apartamentos llenos (seguramente para poderla inaugurar antes de las elecciones)
Y Vueltas esta vez dijo NO,porque los vecinos se preguntaron qué pasaría si la obra no se hace; qué pasaría si la calle se queda como está; qué pasaría si se pierde el dinero;… Y la respuesta fue NADA. No pasaría NADA.
Casi 600.000 € en levantar y acondicionar una vía de poco más de 300 metros (no voy a decir lo que pienso del presupuesto ni donde va a terminar gran parte del dinero) y no han sido capaces de sentarse con los vecinos y consensuar algo realmente útil. No han sido capaces de determinar qué quieren los vecinos y cuando quieren hacerlo.
Y que conste que no estoy en contra de la peatonalización,pero creo que se puede hacer mejor: eliminando los aparcamientos de la vía pero no los de la plaza frente a la ferretería; dejando un carril central para vehículos (con restricción de velocidad) y aumentando el espacio peatonal dejando todo al mismo nivel; ejecutando la obra por fases en épocas de baja ocupación;… Estas ideas tan sencillas no son mías,son de vecinos de Vueltas. Lo único que yo pude hacer con sus quejas fue decirlas en el pleno del día 31 de octubre. Textualmente: «Existe un gran malestar entre los vecinos de Vueltas con el tema de la obra de peatonalización. Más allá de que el Cabildo viniera a VGR como siempre con un proyecto ya hecho y la amenaza de perder el dinero de la inversión,dicen los vecinos (sobre todo los dueños de apartamentos) que se hizo la promesa de llevar a cabo los trabajos en los meses de baja ocupación mientras que,las noticias que han salido,dicen que se va a empezar justo en temporada alta. Entiendo que esto va en contra de poder tener la obra terminada para las elecciones pero ¿Va a hacer algo el ayuntamiento para defender a los vecinos de Vueltas en este aspecto?» La respuesta fue que no se podía hacer nada.
Al final la obra se hará (ya se sabe quién manda) y los turistas abandonarán Vueltas huyendo del ruido. Puede que se termine y puede que no. Quizás la Calle Vueltas sea la nueva Obra Pufa de esta isla,u otro monumento a la mediocridad medio-acabado. Y esto seguirá pasando hasta que todos nos plantemos y empecemos a decidir nuestro futuro exigiendo las obras queremos y cuando las queremos.
Asterix y Obelix no dejan de ser personajes de ficción. En la realidad,el imperio romano dominó el mundo conocido,incluso la Galia (actual Francia) pero no olvidemos que también Roma cayó. Al final todos caen.
Dailos J. Dorta Barroso
LaGomeraSeMueve