Para el colectivo estudiantil estas medidas carecen de carácter pedagógico y son un paso atrás en los avances que se habían conseguido en la educación en el respeto a la diversidad,las relaciones personales,la vida en comunidad,la igualdad entre hombres y mujeres,la
Constitución o los Derechos Humanos.

La nueva asignatura,Educación Cívica y Constitucional,suprime todo lo referido a las emociones y a la salud sexual por considerar que invade el terreno moral que corresponde a la familia. Pero para el colectivo estudiantil es importante que éstos sigan impartiéndose ya que fomentan la igualdad sexual que tanto hace falta para el desarrollo de los adolescentes.
“Educación para la Ciudadanía se puede plantear de una u otra manera,pero es innegable
la necesidad de una educación que fomente la igualdad de todos,independientemente de su sexo,raza o condición sexual. Si se suprime,se estará obviando esta igualdad que es muy importante que se inculque entre los estudiantes” apunta Néstor García,presidente de Udeca.
 
BACHILLER
Udeca ha manifestado en numerosas ocasiones su rechazo más absoluto a una reforma que aumenta los años de bachiller en detrimento de los años de ESO,adelantando de 16 a 15 años la elección de un estudiantes sobre si estudiar FP o Bachiller. “¿Reducir el abandono escolar?” – se pregunta García – “Esta medida es del todo antipedagógica y el único efecto que puede tener es el aumento del abandono escolar,ya que obliga al estudiante a elegir su futuro
en una edad en la que las cosas no están nada claras” sentencia García,presidente de Udeca.
Para el colectivo estudiantil lo importante es reforzar y mejorar la orientación tanto formativa como laboral. “No descartamos movilizaciones estudiantiles en Canarias una vez realizadas asambleas en todas las islas,ya que debemos conocer la opinión de los estudiantes canarios
para actuar”.

ESTATUTO DEL DOCENTE
La Unión de Estudiantes de Canarias está de acuerdo en que el docente debe estar valorado por la sociedad y considerado como una pieza clave en el proceso educativo,pero no comparte en ningún caso la necesidad de que sea considerado como una autoridad en el aula,algo que provocaría una mayor distanciamiento entre el profesor y el estudiante. Debe existir un respeto mutuo entre ambos,y una actuación correcta y neutral de la inspección educativa,tanto para casos en los que es el profesor agredido como para en los que es el estudiante el afectado. “No hay que olvidar que los estudios relacionados con la violencia en las aulas determinan que los casos de violencia de estudiantes hacia el profesorado son numéricamente muy parecidos a los que se producen desde el profesorado hacia el estudiante,por lo que hay que mejorar los planes de convivencia,y no imponer una figura legal” según García.
Por último,el colectivo estudiantil exige que cualquier reforma que afecte al sistema educativo sea consensuada con los agentes sociales que intervienen en él: Estudiantado,profesorado,padres y madres,entre otros. Además de abogar por un gran pacto político,social y económico que de una estabilidad al sistema educativo.