La aritmética de los pactos posibles sobre el papel que han dejado los resultados de las elecciones generales de este domingo ha puesto el foco sobre las dos fuerzas nacionalistas canarias, CC y NC, como eventuales elementos determinantes de la investidura del nuevo presidente del Gobierno.
En un escenario en el que no es probable que Mariano Rajoy cuente con el apoyo del PSOE y tampoco que ni él, ni en su caso Pedro Sánchez, busquen la investidura con la participación de los partidos políticos que abanderan el desafío secesionista en Cataluña, ha emergido un hipotético pacto a tres que suma 174 diputados.
Esa cifra la obtendría el líder del PP si logra convencer a Ciudadanos (32) y el PNV (5) para que unan sus escaños a los 137 que le dieron las urnas, lo que formaría un bloque de centro derecha que solo necesitaría convencer a dos diputados más para que voten sí o se abstengan. Justo los que tiene el nacionalismo canario en la Cámara: Ana Oramas, de CC, y Pedro Quevedo, de NC, elegido en la candidatura del PSOE, pero que se pasará al grupo mixto en cuanto se constituyan las Cámaras, como hizo tras los comicios de diciembre
En el supuesto de que esa hipótesis se haga realidad -por ahora, no pasa de teoría sobre el papel, porque ni C’s ni el PNV se han apuntado a ella-, ¿qué condiciones pondrían los nacionalistas canarios a cambio de facilitar un gobierno de Rajoy -algo que no todos sus cuadros comparten- con su voto o con su abstención?
Estas podrían ser algunas de ellas, de acuerdo con las posiciones que ambos partidos han mantenido en los últimos meses y de lo que plantean en su programa electoral (en el caso de NC, de su acuerdo de alianza con el PSOE), ordenadas de más a menos factibles, en función de las mayorías que se precisarían para implementarlas.
1) NUEVO RÉGIMEN ECONÓMICO Y FISCAL (REF) DE CANARIAS
Canarias cuenta con un Régimen Económico y Fiscal (REF) diferente al del resto del país para compensar su lejanía del continente, que tenía que haber sido actualizado la pasada legislatura. El Gobierno canario (CC-PSOE) y el Ejecutivo de Rajoy llegaron en 2015 a un acuerdo casi completo sobre el contenido del nuevo REF, pero solo les dio tiempo a aprobar el bloque fiscal antes de la disolución de las Cortes. El presidente canario, Fernando Clavijo, trató de convencer después al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, de que diera el visto bueno al bloque económico, pero el Gobierno central se encontró con que no podía tomar esa decisión en funciones.
Tanto CC como NC exigen en sus programas que se apruebe por completo el REF de acuerdo a lo que el Parlamento canario decidió por unanimidad en su momento. Del bloque pendiente, el económico, dependen cuestiones como la subvención a los billetes aéreos para residentes (que podría elevarse), las ayudas a las desaladoras (que abastecen de agua en algunas islas a casi toda la población) o las ayudas al transporte de productos de Canarias hacia el continente.
2) INVERSIONES EN INFRAESTRUCTURAS Y PLANES DE EMPLEO
Los ajustes de la pasada legislatura dejaron prácticamente a cero varios convenios del Estado con el Gobierno canario, como el destinado al empleo. Pero uno los recortes más criticados por los nacionalistas (y también por el PSOE) ha afectado a las carreteras, en las que se han invertido 628 millones menos de lo pactado.
En unas islas que carecen de un solo kilómetro de ferrocarril (si se exceptúan las dos líneas de tranvía de Santa Cruz de Tenerife), CC, NC y PSOE han calificado reiteradamente de «inaceptable» que Fomento haya seguido invirtiendo centenares de millones de euros en el AVE a Galicia, mientras en Canarias se recortaban drásticamente los fondos para autovías o para carreteras convencionales.
Tanto CC como NC exigen además que se recupere el Plan Integral de Empleo para Canarias, comunidad donde durante buena parte de la crisis las tasas de paro han superado el 33 por ciento.
En ambos casos, se trata de decisiones que el Consejo de Ministros podría tomar directamente o que el grupo popular y sus potenciales aliados podrían llevar a los presupuestos de 2017.
3) NUEVO MODELO DE FINANCIACIÓN AUTONÓMICA
Los nacionalistas canarios se quejan reiteradamente de que el archipiélago es la comunidad autónoma peor financiada por el sistema vigente. Según sus cálculos, Canarias recibe al año 700 millones de euros menos al año de lo que le correspondería si su financiación por habitante estuviera en la media de todas las CCAA.
Tanto CC como NC exigen la urgente reforma del sistema de financiación vigente, pero ello implica una negociación a 16 (con el Estado y las 15 comunidades de régimen común) en un escenario complejo, porque si Bruselas sigue exigiendo nuevos ajustes, probablemente habrá menos recursos que repartir, de modo que cualquier aumento para una región implicará reducciones para otras.
4) «BLINDAR» EL REF
La ley del REF, aprobada por las Cortes Generales, determina que Canarias no puede recibir menos inversiones del Estado que la media del conjunto de CCAA. Sin embargo, se trata de un mandato incumplido año tras año, tanto por los gobiernos del PSOE como los del PP.
El Gobierno canario llevó el caso incluso al Tribunal Constitucional, pero su sentencia le contestó que una ley del Estado (la de presupuestos de cada año) tiene potestad para imponerse sobre otra ley del mismo rango (el REF), sin incumplir el ordenamiento.
Los nacionalistas canarios quieren ahora que esa cláusula del REF se inserte en la Constitución, para que sea de obligado cumplimiento en los presupuestos generales del Estado de cada año. Un cambio constitucional como ese requeriría de mayorías reforzadas en el Congreso, con el concurso de más partidos que los del pacto.
5) RECONOCIMIENTO CONSTITUCIONAL DE LA SINGULARIDAD DE CANARIAS
CC y NC coinciden en que la Constitución debe reconocer la «singularidad» de Canarias, como hacen las directivas de la Unión Europea, que dispensan al archipiélago un trato diferente como «región ultraperiférica». Llevar ese reconocimiento a la Constitución puede implicar mayorías reforzadas en el Congreso e incluso, disolver las Cortes y convocar un referéndum nacional, en función de en qué capítulo de la Carta Magna se inserte.
Y, fuera de la «agenda canaria», podría añadirse un sexto campo de negociación:
6) PAQUETE SOCIAL Y LABORAL
Tanto CC como NC se oponen a la reforma laboral que aprobó el anterior Gobierno de Rajoy y podrían exigir algún tipo de corrección en ella. Lo mismo ocurre con la Ley de Calidad de la Enseñanza.
En el caso de NC, se trata de un partido de izquierdas, no solo nacionalista, que probablemente no querrá romper los puentes que tiene tendidos con el PSOE y Podemos en instituciones donde gobierna con ambos partidos en coalición, como el Cabildo de Gran Canaria y el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, y exigirá medidas que atenuen los efectos de los recortes sobre los servicios sociales.