El diputado del Grupo Parlamentario Agrupación Socialista Gomera (ASG), Jesús Ramos, trasladó a la Comisión de Transición Ecológica y Lucha contra el Cambio Climático, su satisfacción al conocer de primera mano que el Gobierno actual ratifica su apuesta por la implantación de las energías renovables en las Islas, dejando atrás la inserción del gas ciudad, por lo que celebró que este proyecto sea ya una mera cuestión del pasado.
Asimismo, destacó la importancia de que el Gobierno actual invite a cabildos y ayuntamientos de Canarias a participar en la planificación del sistema energético que demandan las Islas, subrayando una vez más, la defensa de su grupo por la implantación de las energías renovables.
Para Ramos, es esencial que se tenga en cuenta la opinión de estas administraciones para lograr el mayor consenso posible a la hora de afrontar un proyecto de tal magnitud para las Islas. En este sentido, lamentó la mala imagen que ha proyectado Canarias con la intención de implantar el gas ciudad, lo que ha generado el rechazo por parte de la ciudadanía, al que ahora se suma el Banco Europeo de Inversiones (BEI), tras anunciar su negativa a conceder los 125 millones de euros para la introducción del gas por parte de la empresa Redexis.
Por ello, quiso conocer la valoración que hace la propia Consejería sobre este bloque del BEI, al tiempo que mostró su preocupación por la impresión que pueda tener ahora el banco europeo sobre Canarias ya que según indicó, “ello puede poner en el punto de mira a futuras inversiones que puedan ser vitales para nuestro desarrollo energético basado en renovables”.
Aprovechó su intervención para defender, una vez más, su apuesta por la implantación real de las energías limpias, algo que se contempla en el presupuesto en el que detalló que además figura una partida especifica para impulsar la geotermia, que a su juicio “es una energía en la que Canarias tiene mucho que decir y aportar”.
Por ello, confió en que no se reactiven en un futuro los proyectos del gas ciudad, ya que además del rechazo de la sociedad en general, recordó que la regasificadora obtuvo un contundente informe en contra, emitido por la propia Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia.
En definitiva, aludió al interés general y al consenso con las administraciones locales e insulares “para que no vuelvan a suceder este tipo de situaciones y que el BEI no nos saque nuevamente los colores”. “Esperamos recuperar nuestra imagen ante Europa y que se nos vea como una región responsable y comprometida con el medioambiente”, subrayó.
